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Angela Mena: “Cuando expones tu obra, te expones tú. Ya que es algo muy íntimo y es el resultado de un proceso largo”

¿Qué significa para ti el arte y cómo ha influido en tu vida?

El arte para mí ha supuesto un refugio. No puedo ni siquiera decir un momento exacto en el que comienzo a adentrarme en la pintura. Desde muy pequeña era mi forma de evadirme y expresarme. Podría decir que la pintura llegó a mí sin saberlo. En el negocio familiar, (Cuadros Venecia) hemos trabajado siempre enmarcando obras de arte, de ahí el contacto con este mundo.

La próxima semana presentarás tu obra en la Sala Patricio. ¿Cómo describirías la esencia de esta exposición?

Esta exposición es el resultado del momento en el que me encuentro. Estoy en una etapa de reclusión, muy necesaria para crear. Es fruto también de adentrarme en el estudio a diario para permitirme trabajar el error, para permitirme el fracaso.

En esta exposición he querido hacer una retrospección. A menudo miro atrás con la intención de aprender para seguir avanzando. Por ello aparecen dos paisajes que se enfrentan, son obras de la serie Allí dónde vive el mar (2016). La geometría ya aparecía dentro de esos paisajes. Ahora los paisajes aparecen dentro de la geometría. Cada línea que da comienzo a un elemento geométrico, es una línea de horizonte.

Las esculturas, por su parte, han sido un salto de lo bidimensional a la tridimensionalidad, dando lugar a una nueva relación entre el espectador y la obra. Un proyecto nuevo que ha marcado este año.

Por último, la obra Sólidos perfectos, es el nuevo proyecto en el que estoy investigando. En él vuelco la atención en el material. Sigue estando presente la geometría y el color, la técnica sigue siendo pictórica, sin embargo, hay una transformación en la materia y en la forma.

¿Podrías hablarnos sobre tu proceso creativo? ¿Cómo nacen tus ideas y cómo las llevas a la práctica? ¿Hay algún elemento o concepto recurrente en tu obra que consideres especialmente significativo?

Mi proceso creativo es muy plural, no tengo un método en concreto. Es una mezcla de lo que veo, lo que leo y el trabajo de estudio. Todo va creando un imaginario del que surgen las ideas. Pero este paso es azaroso, me parece mágico el instante en el que idea y proceso se fusionan creando un nuevo proyecto, es lo que llamamos inspiración.

En el mundo del arte, cada obra suele tener una historia detrás. ¿Puedes compartir alguna anécdota o experiencia personal que haya influido en tu trabajo?

Como anécdota, puedo contar que el título de esta exposición surgió en un desayuno con Pepe Barragán, antiguo compañero de estudio, cuando le enseñé la obra nueva que había realizado. Su primera frase fue: “¡mira!, sólidos perfectos”. Esas palabras retumbaron en mi cabeza y supe que tenía que ser el título de esta exposición.

¿Cómo te sientes justo antes de exponer tu obra al público? ¿Hay alguna emoción dominante?

Hay una mezcla de emociones que van desde la ilusión porque se vea tu trabajo a la incertidumbre. Cuando expones tu obra, te expones tú. Ya que es algo muy íntimo y es el resultado de un proceso largo, de muchas de horas de trabajo y de una dedicación infinita.

¿Crees que es importante que las empresas respalden iniciativas culturales? ¿Cómo puede beneficiar esto a los artistas y a la sociedad en general?

Recuerdo una de las primeras inauguraciones que asistí a Howden, dónde Jose Manuel hablaba justamente del compromiso que las empresas debían mantener con la sociedad. Eso me convenció para exponer en Howden. Porque a mi me gustaría mantener el mismo compromiso con las personas que piensan y actúan de forma tan generosa.

¿Hay algún mensaje o significado específico que esperas transmitir a través de tu obra? ¿Cómo te gustaría que la audiencia se sienta o interprete al experimentar tu exposición?

Verdaderamente intento transmitir una experiencia. Soy consciente de la importancia que tiene la forma en mi obra y el efecto que causa el color. El Arte ha servido a la sociedad desde sus inicios, y aunque mi obra no sea de carácter político o haga una crítica social, creo que aporta algo importante como puede ser el disfrute y la evasión. La atracción que puede causar la armonía de la geometría y el estudio del color conlleva a que el espectador de abstraiga